
Todo empezó en una oscura noche… El colegio, estaba vacío. Solo paseaban por los largos pasillos silenciosamente, las monjas. Ellas, aparentemente eran muy normales, daban clases durante el día y por la noche, se dedicaban a su vida religiosa. Pero un día vi, lo que nadie más vio y, a partir de ahí comprendí que las monjas, eran algo más que monjas…
Yo, estaba en al baño, a las 7 de la tarde, me encontraba en el cuarto piso, cerca de las clases. Estaba lavándome las manos cuando pasó una de las monjas del colegio, no reconocí cuál de ellas era, solamente distinguí algo muy brillante que llevaba en las manos muy cuidadosamente. Lo que vi, tenia forma de huevo y observé como la monja, lo ponía dentro de una taquilla, una taquilla de la clase de 3º de ESO, concretamente, la segunda taquilla de la fila superior.
Al día siguiente, todo el colegio estaba revolucionado, ninguna monja se despegó del teléfono. En todas las clases, mejor dicho, en todas las clases donde las monjas eran las profesoras, había tiempo libre, no acudían a darnos la lección. Nadie entendió nada, todo fue rarísimo.
A última hora de la tarde, me dirigí a francés en la clase de 3º de ESO y fue ahí donde até cabos, a lo mejor fueron erróneos, pero yo creo, que lo entendí. Todo estaba exactamente igual que el día anterior excepto una cosa, ¡una taquilla!, más concretamente la segunda taquilla de la fila superior… Estaba toda llena de abolladuras y, era esa la taquilla en la cual las monjas habían guardado el huevo brillante. Alguien, debió entrar en el colegio y abrir la taquilla mediante golpes de puño. A partir de ahí descubrí la doble vida de las monjas, ¡de nuestras monjas! Y aún me pregunto ¿Tendrán algún tesoro más escondido en alguna de las taquillas del colegio? ¿Sabremos algún día lo que se esconde en el Col·legi Montserrat?
Ariadna Rodrigo
Yo, estaba en al baño, a las 7 de la tarde, me encontraba en el cuarto piso, cerca de las clases. Estaba lavándome las manos cuando pasó una de las monjas del colegio, no reconocí cuál de ellas era, solamente distinguí algo muy brillante que llevaba en las manos muy cuidadosamente. Lo que vi, tenia forma de huevo y observé como la monja, lo ponía dentro de una taquilla, una taquilla de la clase de 3º de ESO, concretamente, la segunda taquilla de la fila superior.
Al día siguiente, todo el colegio estaba revolucionado, ninguna monja se despegó del teléfono. En todas las clases, mejor dicho, en todas las clases donde las monjas eran las profesoras, había tiempo libre, no acudían a darnos la lección. Nadie entendió nada, todo fue rarísimo.
A última hora de la tarde, me dirigí a francés en la clase de 3º de ESO y fue ahí donde até cabos, a lo mejor fueron erróneos, pero yo creo, que lo entendí. Todo estaba exactamente igual que el día anterior excepto una cosa, ¡una taquilla!, más concretamente la segunda taquilla de la fila superior… Estaba toda llena de abolladuras y, era esa la taquilla en la cual las monjas habían guardado el huevo brillante. Alguien, debió entrar en el colegio y abrir la taquilla mediante golpes de puño. A partir de ahí descubrí la doble vida de las monjas, ¡de nuestras monjas! Y aún me pregunto ¿Tendrán algún tesoro más escondido en alguna de las taquillas del colegio? ¿Sabremos algún día lo que se esconde en el Col·legi Montserrat?
Ariadna Rodrigo
Me ha parecido muy original que hayas escogido a las monjas como personajes. Es muy divertido y con mucha intriga y es muy real ya que estamos a diario con las monjas en el colegio.
ResponderEliminarLo que más me ha gustado son las dos últimas frases, te dejan como en suspense, con ganas de que hubiera una segunda parte.
Lo único que podrías poner para mejorarlo, es que era el huevo brillante al final, porque si no, te quedas como que te falta algo, pero en general está genial, a mi me ha gustado mucho y lo encuentro muy interesante de leer.
Ari si haces segunda parte avisame!Me gustaría leerlo!
Esta muy bien en serio.
ResponderEliminarMe ha recordado al internado pero con monjas. El redactado está bien y no me he cansado al leerlo y el principio ha estado muy bien te incita ha leerlo
Espero que no sea verdad que en la taquilla haya eso porque...
MARIONA